Trivial
Espero no haber sido la única persona que te lo haya preguntado.
El día de hoy cuando me levanté he pensado, ¿Por qué saludar siempre de la misma forma? El día de hoy cuando desayuné me pregunte ¿Por qué saludar con las mismas palabras? El día de hoy cuando me bañe dije ¿Por qué saludar con los mismos gestos? El día de hoy cuando me senté a escribir grite ¡¿Por qué la trivialidad importa?!
A la par que suceden las cosas somos capaces de distinguir entre lo que importa y lo trivial, lo que importa se convierte en algo fundamental, es un eje a través del cual gira nuestra vida; lo trivial es probablemente lo que siempre sucede, lo que probablemente no impacte, lo que todos los días haces o lo que todos los días piensas. Sin embargo, ¿Cuándo fue que empezamos a despreciar lo trivial? ¿Cuándo es que una sonrisa, un abrazo, un niño llorando, una señora caminando, un pájaro volando se convirtió en algo trivial? Juzgamos rápido y vemos poco. Hemos crecido dejándonos de sorprender de las cosas y hemos aprendido a ojear la superficie sin indagar el contenido.
Hoy en día ¿A dónde vamos? Solo detente un rato y piensa ¿En dónde estás? Y ¿Por qué estás? ¿Cuando empezamos a llamar trivial a una gran conversación? ¿Cuándo empezamos llamar trivial a un gran error?. Mirémonos a nosotros mismos y preguntémonos ¿En qué mundo vivimos? Es un mundo realmente empedernido, en avanzar estrepitosamente hacia un gran progreso. En ese avanzar muchos caen y muchos avanzan, en ese avanzar perdemos y ganamos, y sin embargo, poco a poco la vida se reduce a algo trivial.
Más allá de dónde nuestros ojos pueden ver y de dónde nuestros oídos pueden alcanzar a oír, más allá de donde nuestras manos pueden tocar y nuestra piel sentir, encontramos que lo trivial es probablemente lo más importante en esta época, dónde vivimos atareados pensando que encontrar un trabajo y hacer mucho dinero es el propósito de estar aquí.
Entonces, ¿No les encantaría sentarse solo a escuchar los pájaros cantar? ¿Poder caminar sin contaminación sonora ni visual? ¿Poder abrazar y sonreír? ¿Poder correr y reír? ¿Poder simplemente respirar una vez más? Hoy por hoy la trivialidad es lo que nos mantiene vivos, porque es parte de nuestra humanidad y es parte de nuestra cordura y tranquilidad. Las personas somos ambiciosas y en afán de sobrevivir y mejorar avanzamos constantemente en busca de una gran estabilidad, nadie puede sostener que está mal, sin embargo, no debemos olvidar por mirar más ALLÁ, de lo que ahora está acá.
Realmente lo trivial nos hace recordar de preocuparnos por nuestros amigos, ayudar a nuestros padres, darle la mano a quién la necesita, una sonrisa al desesperanzado, abrazar a nuestros abuelos, jugar con nuestros hermanos, comer con alguien, hacer lo más simple y disfrutarlo al máximo.
En días tan fríos como estos compartir el placer de estar vivo es probablemente lo mejor que uno pueda hacer. Ahora pues, espero haber haberlos entretenido y espero realmente que hay comprendido que todo lo que hoy he escrito se ha convertido en algo irreverentemente e irreversiblemente